Las obras del artista cuencano Boris Ordóñez llegan al MAAC de Guayaquil

‘Acudir a la tempestad, El origen de la nada’, es un estudio crítico-estético-filosófico y hermenéutico, están fraccionadas en tres grandes grupos: las pinturas, las tintas, las plumillas, los metales y los misteriosos abstractos de gran calidad.

El Museo Antropológico y de Arte Contemporáneo – MAAC -, expone la muestra ‘Acudir a la tempestad. El origen de la nada‘ del artista cuencano Boris Ordóñez desde el jueves 22 de septiembre a las 18:30 en la sala de exposiciones temporales.

Los curadores de la exposición, Hernán Pacurucu y Carlos Rojas, proponen varios circuitos, cuyos elementos se sujetan en distintos escenarios. La obra de Ordóñez se construye entre elementos de la realidad con expresiones figurativas, creando arte abstracto; cuyo punto de partida no son mecanismos concretos, sino, representaciones del mundo, desde la visión del artista.

“El alto grado de elaboración de la obra obliga a un detenido ejercicio de atención a fin de que definamos su composición. Comencemos diciendo que el mundo posible, cercano a lo fantástico, con una cierta tonalidad cósmica, es lo que se nos presenta de manera inmediata. Esta aproximación inicial nos llevará a enunciar que estas obras construyen mundos distantes, cuya lógica no se nos muestra de manera evidente. Pero, están ahí esperando ser decodificados, tal como cuando en la fábula de Antoine de Saint-Exupéry, El Principito, en un diálogo con el zorro, este le dice: “Solo con el corazón se puede ver bien; lo esencial es invisible a los ojos”. En la obra de Ordóñez, lo esencial está por descubrirse, no está a simple vista, tampoco está en la superficie de la obra, sino en sus profundidades, donde lo inteligente es ver con otros sentidos que no sean los de la vista”.

Pacurucu y Rojas

El público está invitado a apreciar esta exposición hasta el 15 de octubre, de martes a domingo, de 09:00 a 17:00; con libre ingreso.